Durante la Semana de Mayo, Laura, Miriam y María Cristina del Hogar El Buen Samaritano fueron protagonistas de un gran día que trajo mucha alegría y emoción.
Ellas asisten al Centro de Día para Adultos Mayores del Barrio Yapeyú para finalizar sus estudios primarios y secundarios. Allí, con motivo del acto del 25 de Mayo, en el Día de la Patria, fueron designadas como abanderadas y escoltas, portadoras de la bandera nacional.
El acto fue un momento de mucha emoción, un reconocimiento al esfuerzo y a las ganas de volver a empezar de tantos adultos mayores que asumen el desafío de completar sus estudios. En ese marco dialogamos con el profesor del espacio, Gustavo Mamut, quien compartió lo que significa la educación para quienes asisten a la escuela del Centro de Día.
«La experiencia de vida que trae el adulto mayor se convierte en sabiduría, porque el sentido común también nos da respuestas. Y esa es la verdadera sabiduría por encima de lo académico -que es importante- porque conjuga los valores, las experiencias de vida, la sensibilidad, todo eso constituye la educación de jóvenes y adultos», explicó Gustavo.
En ese marco, el profesor también contó que al hablar con sus alumnos sobre lo que significa el estudio cobra mucha importancia la satisfacción de recibir el certificado, por lo que significa cumplir con el sueño de finalizar la primaria o secundaria. Y por otro lado se hace presente la dimensión de la alegría, la vida, el encuentro, que la palabra de todos tiene lugar y valor, por lo que «la educación de adultos trasciende a aprender a leer y escribir».