Lizi es voluntaria del proyecto Belén Nazaret en Ushuaia. Conoció la iniciativa a través de una compañera, cuando en el año 2020 la casa daba sus primeros pasos para armarse y comenzar a recibir a las mamás. «Lo que más me gustó es que había un proyecto. Por eso no dudé un minuto y me comuniqué para ser parte», cuenta Lizi cuando le preguntamos por su testimonio.
Ella participa en el área de promoción, donde piensan, organizan y desarrollan distintos talleres para las mamás asistentes. En ese espacio Lizi comparte uno de sus dones, la costura: me pareció interesante que ellas puedan tener la posibilidad de conocer alguna actividad que quizás desconozcan. Me pareció bueno darles la posibilidad de tomar contacto con la máquina y las telas para que puedan tener una herramienta más, ya sea para ellas o para que en algún momento, con cierta experiencia, pueda transformarse en una fuente laboral, explica Lizi.
El valor del tiempo compartido en la casa
La casa de Belén Nazaret es el lugar de referencia para las distintas actividades que se realizan desde el voluntariado. Para las madres que asisten regularmente a los talleres el espacio adquiere un valor especial. Así lo describe Lizi: lo que veo es que es un momento que las mamás esperan, que lo han incorporado como algo propio. Desde el inicio lo que me parece más interesante es que ellas puedan tener la posibilidad de venir a la casa, de realizar una actividad que es para ellas y que a su vez no tengan que estar tan pendientes de sus niños. Porque a todos nos gusta tener actividades para uno, para sí mismo. Acá, además de que les ofrecemos aprender algo, es como su recreo, se sienten atendidas. Y saben que los niños están cuidados y entretenidos.

«Me parece super importante que tengamos la posibilidad de tener este tipo de espacios para esas mamás que quizás no encuentran una salida o golpean una puerta y no saben con qué se van a encontrar, o saben que lo más probable es que no encuentren una respuesta. Me parece que las mamás a las que acompañamos hoy encuentran un lugar, donde se sienten parte, donde se sienten protagonistas. Eso es muy valioso para la sociedad de hoy, que como este espacio haya muchos más», concluye Lizi.
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