En el merendero «Juventud por el Buen Camino» de Balnearia, la Navidad comenzó a vivirse de manera especial, con actividades que unieron a los niños, voluntarios y toda la comunidad. Con una profunda reflexión sobre el verdadero significado de la Navidad, los niños se sumergieron en un proyecto de agradecimiento y esperanza que llegó a todas las instituciones, comercios y particulares que colaboran con la causa.
Como parte de una hermosa tradición, los niños del merendero realizaron pinitos y estrellas navideñas, que fueron entregados a quienes han apoyado la labor del merendero durante todo el año. Este pequeño gesto de cariño fue una forma de agradecer el compromiso y el esfuerzo de aquellos que hacen posible que cada día sea una nueva oportunidad para los niños que asisten al merendero.
El corazón de las actividades estuvo en las dos jornadas de catequesis, que se centraron en el mensaje «Navidad es Jesús». En estas sesiones, los niños reflexionaron sobre el regalo más grande que se puede recibir: Jesús, quien viene a poner luz y esperanza en nuestras vidas. Fue un espacio de encuentro y crecimiento, donde la fe y la solidaridad se vivieron con intensidad.
Además, cada niño recibirá un presente navideño especial, creado con materiales reciclados. Esta iniciativa no solo trae la alegría de la Navidad, sino que también promueve el cuidado del medio ambiente, enseñando a los más pequeños la importancia de reciclar y valorar lo que tenemos.
El merendero «Juventud por el Buen Camino» continúa siendo un lugar de encuentro y transformación para los niños de Balnearia. Con el apoyo de la comunidad y el esfuerzo de todos los voluntarios, se sigue caminando en el compromiso de construir una sociedad más solidaria, basada en los valores del Evangelio y en el amor al prójimo.
¡Gracias a todos por ser parte de esta hermosa Navidad llena de luz, esperanza y solidaridad!
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