“Los Peregrinos” es una de las obras más antiguas de Hombre Nuevo. Desde el año 2001 se lleva a cabo este servicio en la ciudad de Córdoba para estar cerca y acompañar la realidad de las personas que se encuentran en situación de calle.
Mirta hace nueve años que camina junto a ellos. Para ella se trata de una actividad que te “cambia la vida”, tal como lo expresa el lema de Hombre Nuevo.
Luego de tantos años de voluntariado, la invitamos a hacer memoria de lo vivido y relatar algunos de los aprendizajes que deja el tiempo compartido junto a los hermanos que están en la calle:
“La mirada hacia la realidad, hacia afuera y hacia uno mismo se modifica con el andar, con el conocer gente, con el ver rostros, con las situaciones que nos tocan a cotidiano y la amistad que se va tejiendo en tantos años con las personas que se encuentran en la calle. Sobre todo con quienes continúan en el mismo lugar y con quienes establecemos un vínculo más duradero.
La enseñanza es mucha. Lo que puedo rescatar en este momento es la aceptación de la vida, la mirada positiva que tienen a pesar de las circunstancias, el agradecimiento y la fe en Dios. Ellos son personas muy agradecidas, son creyentes, creen en un Dios y se aferran a Él. De modo que me ha dejado un gran aprendizaje en la aceptación, en el esperar y confiar. Hay mucho para aprender desde ese lugar.
El ser Peregrino invita a salir al modo de María y se cimenta en el Evangelio: “tuve hambre, me diste de comer, tuve sed, me diste de beber”. Sin dudas que es el amor a Dios y el querer hacer su voluntad lo que me movió a ingresar alguna vez a Peregrinos y a perseverar en este lugar”.
El servicio en la calle: encuentro, charlas y amistad
Actualmente el equipo de voluntarios realiza una salida semanal para visitar a quienes acompañan desde hace un tiempo. En cada encuentro se sientan a compartir la vida: conversan y entregan alguna comida especial. “Les llevamos algo que a ellos les gusta. Los vamos conociendo y vamos cumpliendo un poco sus deseos en eso”, explica Mirta.
Aunque las temáticas a las que Los Peregrinos intentan dar respuesta son variadas -tienen que ver con la salud, el aseo, la asistencia para realizar trámites y conseguir documentación-, Mirta explica que el trabajo principal es de vinculación: “lo que más hacemos en este momento es escuchar, es estar, es establecer y profundizar el vínculo. Eso nos permite luego dar otros pasos para poder acompañarlos en el proceso de salir de la situación de calle”.
Como tantas otras obras, el sueño y objetivo más grande de Los Peregrinos es lograr que un día ya no haya personas tiradas en las plazas, parques y calles de la ciudad, sino que todos puedan vivir en dignidad.
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